BLOGSSIPGIRL PRESENTA: RAFA SÁNCHEZ (LA UNIÓN), LA ELEGANCIA DE UNA VOZ CÁLIDA Y PROFUNDA.

Cantante, fundador, líder de La Unión, banda mítica de los 80-90, un grupo que marcó nuestra juventud.

¿Quién no conoce a Rafa Sánchez? Su voz sexy, su mirada enigmática, su sonrisa hechizante y su luz vibrante nos invitaba a soñar con paraísos lejanos, a aullar como un lobo bajo la luna de París, a sentirnos como un volcán en erupción, a vivir al este del edén o a viajar en un tren de largo recorrido, pero siempre nos dejaba con ganas de más y más...

De esas ganas nació la necesidad de vivir su etapa en solitario y desde 2020 él es Rafa Sánchez, la voz, el espíritu que nos enloquece y nos vuelve a sorprender con su estilo elegante, sofisticado y esa voz única, rota, profunda, rasgada, envolvente y atractiva que acaricia nuestra alma y que transmite sentimiento y emoción. 

Él es Rafa Sánchez, distinguido y sofisticado caballero, una figura con gran carisma que promete seguir dándonos más y más, con sus canciones en solitario. 

Su estilo ha evolucionado, pero la base sigue siendo el sonido clásico e inconfundible de La Unión. Un estilo, como siempre, muy cuidado, romántico, cálido y elegante, aderezado con tendencias más actuales.

El pasado sábado 19 de noviembre, Zaragoza tuvo la ocasión de vibrar con el concierto de Rafa Sánchez, incluido dentro de su “Lobo Hombre Tour 2022”, en Oasis Club Teatro. 

Poco antes, Rafa Sánchez me regaló unos momentos mágicos al invitarme a las pruebas de sonido y concederme una entrevista, en la que abre su corazón y demuestra su calidad como persona. 

Vístete princesa y acompáñame a conocer sus secretos más personales, porque vuelve el amor, vuelve la voz. 

La entrevista:

Lo primero de todo, quiero agradecerte el gesto tan bonito que has tenido al concederme la entrevista. No, al revés, agradecerte a ti el que me contactaras. Para mí es importante que me sigas en mi Instagram, que lo manejo yo personalmente, y que te acercaras. Te agradezco el que hagas promoción, porque se puede tener la mejor de las canciones pero si la gente no la escucha es como no tener nada. 

¿Quién es Rafa Sánchez, la persona cuando baja del escenario? Soy una persona muy cercana. Yo creo, incluso, que si hubiera sido un poquito más divo me hubiera ido un poquito mejor (risas), aunque al final estoy muy contento conmigo mismo. Yo era estudiante de arquitectura y pienso que hubiera sido una persona muy complicada, muy snob, si al final  hubiera acabado siendo ese mi oficio. Siempre lo he dicho, el rock and roll me ha hecho ser mucho mejor persona. He viajado mucho, he visto muchas formas diferentes de vivir y eso me ha abierto mucho la mente y entonces, como digo en una de mis canciones “nada espero de la gente, pero lo que me viene es regalado”. Estoy abierto a todo tipo de encuentros, de sentimientos, pero tampoco de una manera muy pueril, sé que me estoy moviendo en un terreno que es duro, la vida es dura, la gente muchas veces te decepciona, pero no por ello me pongo barreras para cuidar mi corazoncito, no, hay que arriesgarse, hay que salir y hay que disfrutar, porque la vida son dos días

¿Cómo te iniciaste en el mundo de la música? Antes de entrar en arquitectura ya estaba en grupos, mi primer grupo se llamó Quick, hicimos como 4-5 actuaciones, pero bueno de repente, no sé porque, yo creo que al cambiar colegio, ya perdí cierta cercanía con el resto de la banda. Luego, cuando yo estudiaba arquitectura se dibujaba en tablero con rotring y pasaba muchas horas delante del tablero y me acompañaba la radio. A finales de los 70, primeros de los 80, los programas de radio eran increíbles, sobre todo porque también hubo una gran apertura después de la salida de la dictadura. Aquí llegó toda la influencia extranjera, sobre todo la música anglosajona que ha sido, yo creo, la música que más nos ha influido en la época de La Unión y ahora también conmigo en solitario. De hecho nos hemos sentido siempre un poco fuera de lo que se ha entendido como la movida o el pop nacional. Nunca hemos tenido batería dentro del grupo, hemos funcionada con cajas de ritmos y entonces eso nos ha hecho ser un poco diferentes a la escena española en general y ya te digo, la arquitectura y todas esas horas oyendo champú, peine y brillantina, Gonzalo Garrido, Mario Armero… Las conversaciones más interesantes que he tenido de música han sido después de entregar proyectos, en el bar de arquitectura. 

Por lo que veo, la arquitectura te influyó de manera notable en tu vida pero no llegaste a terminar la carrera, ¿Te gustaría retomar? No, en absoluto. Me quedé en cuarto, me iba muy bien, sí, pero no me arrepiento de nada, me considero un tipo muy afortunado de poder vivir 39 años en el mundo de la música. Aparte, es que viajar me gusta mucho y no hay manera mejor de viajar que con el rock.  He viajado de todas formas, por mi cuenta, con tour operator, pero con el rock allá donde vas hay gente que te está esperando, que te festeja,  que te enseña su ciudad tal y como es, no como la que ven los turistas, si no lo más profundo y real. Viajar con el rock and roll es otra cosa y aporta vivencias increíbles.

Cuatro décadas triunfando en la música. Siendo niño... ¿Te imaginabas llegar hasta donde has llegado? No, la verdad es que la arquitectura me gustaba mucho, pero también tengo que decirte que la música en mi casa ha sido muy importante. De hecho tengo dos hermanos gemelos, 6 años mayores que yo, que eran muy melómanos y desde muy pequeños Beatles ha estado en casa sonando, luego evolucionó a Lou Reed, David Bowie, el glam rock, Led Zeppelin, Jackson Five… Hay un momento que recordaré toda la vida, que es cuando al volver del colegio, nos poníamos mis hermanos y yo delante de espejo con raquetas imitando guitarras y hacíamos que éramos un grupo de rock. A veces le robaba la peluca a mi madre o, si no podía porque se enfadaba, me ponía los leotardos de mi hermana y hacía como si fuera un heavy. También te contaría una anécdota, ya que yo era muy bailongo en las discotecas y me sentía tan unido a la músic y el baile, que pensaba que la gente me miraba en la discoteca. Ahora he conseguido que eso sea así, ahora me miran, sé que me están mirando.

¿Cuándo supiste que eras una estrella, que estabas triunfando, que la gente os quería, os seguía y os apoyaba? Para bien o para mal lo supimos desde el primer momento, sobre todo por el fenómeno fans. La primera canción, Lobo hombre en París, estuvo 11 semanas número 1. Y luego, por esa época también, la radio era muy importante, había un programa, el Gran Musical en la Cadena Ser que se emitía  los domingos y ahí existía un contacto directo con las fans, un poco demasiado directo, porque yo recuerdo, al salir de un Gran Musical que nos lanzaban besos como flechas… Llegado ese punto consideras que has dado en el clavo, que eres una estrella. Pero, en nuestro caso, fue muy positivo que nuestro segundo disco no fuera lo que la gente esperaba ya que eso supuso una cura de humildad, en el instante preciso, que nos hizo aprender a bajarnos del escenario. En su momento fue algo duro, de hecho en el tercer álbum surgieron canciones como “Dónde estabais en los malos tiempos”, hablando de eso, de que cuando te va muy bien todo el mucho está encantado contigo pero cuando ya no te va tan bien, te quedas al final con los que son verdaderamente tus amigos. A partir de ahí no me considero una estrella del Rock and Roll me considero una variedad. Mi labor en la vida es hacer que la gente lo pase bien, ya sean 40 ó 40.000, no me importa la cantidad de gente que haya, siempre intento que los que estén lo pasen bien.

Hablando de eso… Hoy nos traes un concierto muy especial, muy íntimo, en la Sala Oasis,  un recinto pequeñito... ¿Qué prefieres, conciertos más íntimos o conciertos masivos? Cada formato tiene sus ventajas, en los sitios pequeños es muy divertido porque ves las caras de la gente, y realmente ves como están vibrando. En los grandes espectáculos no ves las caras pero, de repente, 40.000 personas gritando o cantando contigo una canción es de ponerse los  pelos de punta… entonces cada cosa tiene su lado bueno y me gustan los dos. De hecho estuve cantando hace poco con Nacho Cano en el Wanda “Lobo hombre en París” y fue una experiencia brutal, 50.000 personas coreando una canción es una masa coral espectacular.

De tu etapa con La Unión ¿con qué canción te quedas, cuál es la que más identifica al grupo? Obviamente tenemos que darle muchas gracias a “Lobo hombre” puesto que a día de hoy es uno de los momentazos del concierto, de hecho es la segunda canción del pop de los 80 que más se ha escuchado en spotify, con 254 millones de escuchas, detrás de “Sufre mamón” de Hombres G. Por supuesto, Lobo es muy importante nos ha abierto puertas, en latinoAmérica es un himno. Pero yo cuando canto “Verano del 82” siento una vibración muy especial. La verdad es que al final son todas hijas mías y, como dicen las madres, las quieres a todas por igual. 

Tu vida, tu mundo es la música, ¿Fue dura la decisión de dejar la Unión? Fue necesaria más que dura. Fue mucho más duro los 2 años anteriores al comunicado de disolución de la banda, porque ya sólo quedábamos Luis y yo y ya habíamos tenido las desavenencias. Fueron dos años, porque los dos somos muy cabezones, yendo en la misma furgoneta con una electricidad negativa… Y esos dos años sí que fueron duros. 

Y fue entonces cuando decidiste empezar esta nueva etapa en solitario. Ahora yo ya he pasado página, había un componente crucial, ya no había magia a la hora de componer. Podría haber seguido con La Unión hasta que me muriera, porque funcionaba perfectamente, pero en mi cabeza ya era el sentido peyorativo de trabajo. Y ahora me lo paso muy bien, tengo una banda espléndida formada por Fermín Villaescusa, el teclista, Mario Cea, guitarra, Ángel Olivares, batería y Adrián Bartol, bajo, que son muy buenos músicos y bellísimas personas. Y luego, esta nueva situación,  me permite componer con diferente gente, gran parte del disco la he compuesto con Fermín Villaescusa. 

¿Puedes contarnos algo acerca de tus próximos proyectos? En este momento estoy haciendo proyectos con David Casamayor, que es un productor del sello Blanco Y Negro que tanto ha hecho bailar a la gente en Ibiza y que me está aportando un aire nuevo muy especial.

Y ya para terminar ¿Qué es lo que más te gusta de nuestra ciudad? ¿Qué destacarías de ella? La aridez y el color rojizo del paisaje y el río Ebro. Y, además, tengo muy buenos recuerdos de la Expo 2008.

Las pruebas de sonido:

Estilismo Blogssipgirl: Dondola Moda. C/Cádiz, 8 Zaragoza 

El concierto:

A tener en cuenta: Puedes seguir a Rafa Sánchez a través de Instagram, Facebook, Youtube y Spotify. Para contratar: contrataciones@rafasanchezoficial.com

Recuerda: Si tú también quieres formar parte de la familia y amigos Blogssipgirl manda un email a blogssipgirl@gmail.com y hablaremos, nos conoceremos y te prepararé diferentes propuestas para enfocar tu camino y difundir tu negocio. ¿Te unes?

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Bisous, bisous.

S.